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las mejores posturas sexuales
El hombre se pone de cuclillas y la penetra, agarrando sus piernas. De esta manera, se logra un contacto total con el punto g femenino y una mayor fricción en el pene con los movimientos. Elle Chase, educadora sexual certificada y autora de101 posiciones positivas para el cuerpo para potenciar su vida sexual, recomienda esta posición, que es ideal además de esto para los hombres con barriga.
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Las Mejores Situaciones Para Conseguir Un Orgasmo Profundo
“El misionero tiene mala popularidad, pero para mí se encuentra dentro de las mejores posiciones.Puedes crear y ser creativo con la situación de las piernas de , moviéndolas a fin de que estén más juntas o más separadas”, señala. Estas se contagian mediante el contacto y el trueque de fluidos que se produce en todas las relaciones íntimas, ya sean anales, vaginales u orales. Es especialmente esencial que siempre y en todo momento te protejas con el condón si tienes muchas parejas sexuales, ya que estarás más expuesto a estos contagios. Es fundamental utilizar el preservativo en todas tus relaciones íntimas. Radica en que la pareja se tumbe boca abajo, un individuo sobre la otra, esta posición también deja control de la penetración y un buen disfrute del acto.
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Lo relevante de esta postura es que impulsa intensamente el punto G. Es una de las preferidas de las mujeres pues logran la estimulación de las paredes vaginales, el mítico punto G. Por su lado, es trabajo de la pareja poder llegar a estimular el clítoris y utilizar sus manos para estimular otras zonas erógenas. En esta posición, él tiene todo el control de la acción, pues controla todos los movimientos de su pene, que es introducido en la boca de la fémina. Ella solo ha de estar recibiendo el integrante viril en sus labios.
En cuanto a penetración, la posición preferida de María es la “L de espaldas”. La mujer se ubica de espaldas al hombre y tumba la parte superior del cuerpo en una mesa o cama alta y deja las piernas en el suelo. El hombre se ubica detrás para poder hacer la penetración. Sirve tanto para penetración vaginal como anal, y se puede alentar el clítoris a su vez. Por qué.“Es muy placentera porque estimulas muchas unas partes del cuerpo al unísono. Puedes levantar un tanto el tórax para que acaricien tus pechos también y también ir jugando con el vaivén del cuerpo”. Un truco.“Un buen lubricante o un estimulador del punto G.
Sabes a la perfección qué va a hacer tu pareja, de qué forma, a qué ritmo, con qué intensidad, etc. Un individuo se pone a cuatro patas o de rodillas con los brazos y la cabeza apoyada mientras que la otra, que tiene las manos y la boca libres, se ubica de rodillas por detrás. La penetración es muy profunda, lo que puede ser molesto al comienzo. Para disfrutar del sexo anal al límite, lo más importante es la estimulación previa y la relajación.
Mientras la penetra, puede estimularse el clítoris con el rozamiento de la pelvis de su compañero y supervisar asimismo el ritmo de la penetración con su movimiento de caderas. “La situación sexual más popular entre nuestros lectores es la 68”, afirma Struyk. Esta posición es como el 69, pero con la distingue de que la persona que está arriba no se da un giro mirando al compañero, sino se queda arriba recibiendo su placer. Conquiste en que, cuando la mujer está a 4 patas, el hombre debe agarrar sus caderas y \’subirlas\’ contra para lograr que la penetración sea más profunda.
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Diríase que las contracciones del útero que provoca el orgasmo podrían adelantar el parto. Además de que el semen contiene prostaglandinas, que favorecen el ablandamiento del músculo uterino, por eso se aconsejaba tener relaciones íntimas los últimos días de embarazo o en el momento en que el bebé venía con retardo. La mujer se va a sentir más cómoda en aquellas posturas que no impliquen estar tumbada con todo el peso de la barriga sobre ella . Las mejores posturas van a ser en las que la barriga no choque contra el hombre, por poner un ejemplo de espaldas a él o estando la mujer encima. Anteriormente se aconsejaba la abstinencia, aun a lo largo de todo el embarazo, pues se creía que podría dañar al bebé, pero en la actualidad se conoce que esto no es así. Se pueden sostener relaciones íntimas hasta el final de la gestación (a menos que se den algunas situaciones como placenta previa, sangrado vaginal o que la bolsa amniótica ya esté rota). Es más, tenerlas ayudará a que la mujer esté más relajada y la pareja más unida en esta etapa tan especial.
